Los negocios son parte de la solución para un verdadero desarrollo sostenible y éste es un medio eficaz a largo plazo para la estrategia de crecimiento de las empresas. No importa el tamaño de su negocio, sea protagonista de esta nueva era.
Los próximos diez años pudieran denominarse “la década de la sostenibilidad” y la tendencia es que los procesos de innovación y desarrollo, planificación y gerencia, producción y regulación, entre otros; pasen por el prisma de la sostenibilidad.
Por ejemplo. La industria automotriz está volcada al diseño de autos más eficientes, amigables con el medio ambiente. La industria de la energía retomará con mayor ímpetu el desarrollo de energías alternativas y la crisis de BP en el golfo de México generará una mayor presión y acelerará la innovación en esta área. El Presidente de los Estados Unidos, Barack Obama ha insinuado que esta tragedia le permitirá apalancar la reforma energética que necesita EE.UU para abandonar su adicción al petróleo.
La industria de consumo masivo también se suma a la era de la sostenibilidad y la tendencia comienza a manifestarse a través de la búsqueda de procesos eco-eficientes de manufactura, etiquetas verdes para los productos, empaques biodegradables y un mercadeo y posicionamiento basados en estos atributos.
Datos como los arrojados por el Índice de Confianza Climática elaborado por el HSBC Climate Partnership que amablemente me envió Mónica Alvarado, Directora de Información del Instituto Smithsonian, demuestran que casi dos tercios (65%) de las personas encuestadas en el mundo creen que un pacto internacional para reducir emisiones es “muy importante”.
Pero Latinoamérica requiere una mayor conciencia en este sentido. Según el Centro Latinoamericano para la Competitividad y el Desarrollo Sostenible de la escuela de negocios INCAE, “80% de las firmas de Latinoamérica se limita a cumplir las leyes ambientales locales” y esto no es suficiente. Para afrontar los nuevos desafíos en el mundo se requieren procesos de autorregulación y una clara visión de los líderes empresariales para orientar sus modelos de negocio hacia la sostenibilidad.
Otra referencia es el estudio elaborado por el Oxford University’s Environmental Change Institute, según el cual el compromiso corporativo hacia prácticas verdes influye cada vez más en la conducta de compra de quienes consumen y se estima que 79% de las personas consumidoras prefiere comprar en compañías responsables ambientalmente.
En adición, el informe “Vision 2050. The new agenda for business” publicado por el World Business Council for Sustainable Development destaca que los negocios son parte de la solución para un verdadero desarrollo sostenible y éste es un medio eficaz a largo plazo para la estrategia de crecimiento de las empresas. También puntualiza que los negocios no pueden tener éxito en sociedades que fracasan, la pobreza es un enemigo clave para las sociedades estables, el acceso a los mercados para todos favorece el desarrollo sostenible, las empresas tienen que ganarse su licencia para operar, innovar y crecer, la eco-eficiencia es la esencia de las oportunidades empresariales para el desarrollo sostenible, entre otros aspectos.
Por último, el mes pasado se realizó en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York, el Global Compact Leaders Summit 2010, al que asistieron cerca de 1200 líderes de las principales empresas del mundo, para debatir sobre el futuro de la responsabilidad social corporativa.
Panamá estuvo representado por Teresa de Alfaro, Directora Ejecutiva de Sumarse, Baty Eleta y Dácil Acevedo, de Stratego Communication y Maricel Méndez de Plataforma.
Este escenario fue propicio para presentar el estudio “Era de la Sostenibilidad – CEO Study 2010” realizado por Accenture. Según este estudio, quienes tienen la máxima responsabilidad de las empresas creen que dentro de una década se podría alcanzar un punto de inflexión en el cual la sostenibilidad y la responsabilidad social serán parte integral del modelo de negocios.
El mensaje es claro, no importa el tamaño de su empresa, comience a desarrollar criterios de desarrollo sostenible en todas las áreas de su negocio, de lo contrario, tiene sus días contados.